Al final del jirón Chiclayo, en el distrito limeño del Rímac, se ubica el monumental Paseo de Aguas, una construcción mandada a hacer en el siglo XVIII, por el virrey Amat y Juniet a raíz de una promesa que le hizo a Micaela Villegas, más conocida como La Perricholi dentro de la sociedad limeña en la época de la colonia.
Paseo de Aguas |
Considerado una obra maestra de la arquitectura colonial, el paseo se construyó en torno a sistemas de acueductos, cascadas y fuentes, los cuales debían alimentarse con las aguas del río Rímac.
Paseo de Aguas vista nocturna |
El Paseo de Aguas es un paseo ubicado en el distrito del Rímac en la ciudad de Lima, capital del Perú. Uno de los lugares más conocidos del distrito. El Paseo de Aguas fue construido entre 1770 y 1776 por el virrey Manuel Amat y Juniet. En su cercanía se encuentra la plaza de toros de Acho.
Datos de interés
En el año 1877, en el espacio del Paseo de Aguas solía operar la estación de tranvías sangre de Lima. De este antiguo edificio solo sobrevive uno de los antiguos muros perimétricos ubicado al lado izquierdo del arco central de la plaza.
Asimismo, esta edificación fue parte del “primer proyecto de modernidad urbana” en Hispanoamérica y de las reformas que se realizaron como producto del terremoto de 1746.
En un principio, este lugar recibió el nombre de Paseo de la Nabona, cuyo nombre proviene de la ciudad francesa de Narbona que tenía un antiguo juego de aguas el cual se pretendía imitar.
Hoy podrás observar el hermoso espejo de agua que se encuentra al centro de la plaza, coronado por un hermoso arco.
El parque cuenta con la parte colonial del arco principal y restos de la pared lateral que data del siglo XVIII, así como jardines, surtidores, juegos y caídas de agua.
Te pongo la luna a tus pies
Se dice que Micaela Villegas o también conocida como la Perricholi, le dijo al virrey que no cedería a sus cortejos si es que no le pusiera primera la luna a sus pies y ¿adivinen que hizo el Virrey? Pues nada más y nada menos que crear este monumento, con un arco que se mantiene en donde el agua caía y en la noche reflejaba la luna por lo que según se cuenta, Micaela después de esta muestra de amor sucumbió al amor de su Virrey Amat.
Su Arquitectura
El monumento tiene un estilo afrancesado, con una arquitectura lujosa y elegante. Su estilo es una consecuencia de las reformas que se introdujeron durante el régimen político borbónico.
Posee en su ingreso una arquería, frente a su muro, el paseo rodeaba un gran espejo de agua y debió ser un acueducto para que las aguas del Rímac cayeran en cascada desde su elevado arco central.
Cuenta la historia que una vez que el virrey Amat abandonó el cargo y permanecía en España, su antigua amante La Perricholi, se mudó a una casa de molino en la esquina entre el paseo y la alameda, donde lo recordó por siempre.
Actualmente, el Paseo de Aguas es uno de los lugares más hermosos del distrito del Rímac, el cual es visitado por cientos de personas, como parte de la ruta turística en el Centro Histórico de Lima.